Cantando a la libertad.

Se puede decir que Italia, a parte de su himno oficial, tiene también un himno extraoficial, que aún hoy les hace vibrar y emocionarse quizá más que el propio. Se trata de "Va pensiero" o coro de los esclavos, que se puede encontrar en el tercer acto de la Ópera de Verdi, "Nabucco". Está inspirado en el Salmo 137 "Super fluvia Babilonis" y trata del exilio hebreo en Babilonia tras la pérdida del primer templo de Jerusalén.

Verdi hizo esta obra a regañadientes, ya que vivía una situación personal muy complicada porque su mujer y sus hijos habían muerto recientemente y él se había prometido no volver a componer. Y de hecho el libreto de "Nabucco" cayó en sus manos casi de casualidad, además el rey Vittorio Emmanuele II, le pidió que creara un himno que uniera a todos los italianos, que en esos momentos se encontraban divididos y así crear una unidad de Italia, aunque de momento fuera sólo sentimental, para los tiempos convulsos que se avecinaban. Y Verdi lo consiguió, ya que la obra cautivó a toda Italia tras su estreno en la Scala de Milán en 1842. Así que el "Va pensiero" se convirtió en la canción de los patriotas italianos que buscaban la unidad nacional y la soberanía.

Esta es la época del "Risorgimento" italiano, un movimiento romántico que quería conseguir la reunificación de Italia, ya que consideraban que el Estado italiano lo había fundado el Emperador Augusto allá por el siglo I. Pero ahora la realidad era otra e Italia en sí no existía, sino que estaba dividida en varios estados: Lombardía pertenecía al imperio Austr-Húngaro, en el Lacio estaban los Estados Pontificios, el Ducado de Toscana, el Reino de Piamonte, el Reino de Dos Sicilias, etc. Así que en este ambiente unificador es en el que triunfa la música de Verdi. Un ejemplo de lo hondo que caló en el pueblo italiano el "Va pensiero" lo encontramos en la visita de Francisco José I, emperador de Austria, e Isabel de Baviera, su esposa, más conocida como Sissi, a la ciudad de Milán en el año 1849. Fueron a la Scala, a ver la representación de una ópera y, al hacer su entrada en el teatro, todo el público se puso de pie y cantaron juntos en "Va pensiero" reivindicando de esta manera su libertad del Imperio Austro-Húngaro. Se dice que recibieron el aplauso de la emperatriz. Este episodio se puede ver en una de las películas de Sissi, que a pesar de ser austro-alemanas, son bastante fieles desde el punto de vista histórico. Italia finalmente conseguiría su unificación en el año 1861.

También hubo otra ocasión en la que el pueblo italiano de manera espontánea se puso a cantar el "Va pensiero": el 27 de enero de 1901, también el la ciudad de Milán, al paso del cortejo fúnebre de Verdi.